MUJER COMO BASE DEL MUNDO.

Este es un mensaje especial, porque va dirigido a mujeres con grandes mentes, que fueron enviadas al mundo para darle vida, a la propia vida, de todos aquellos que se han topado con sus historias.

Sin duda ser mujer es uno de los atributos más especiales de una parte considerable de las personas de este mundo. Somos nosotras las que con nuestro misterio podemos levantar imperios o hacer caer una vida, por eso tenemos gran responsabilidad respecto de nuestras decisiones, más la mayor responsabilidad es con nosotras, con nuestra historia, vivir nuestra vida y agradecer en gran medida lo que se nos ha otorgado y encargado.

Ser una mujer líder no es fácil, porque cuando tienes la capacidad para administrar un liderazgo necesitas poseer la fortaleza de la humildad para llorar incluso por aquellos a quienes lideras en este camino llamado realidad, ya sea en el trabajo, la universidad, la vida social y sobre todo familiar.

Creo firmemente que el propósito de una mujer va entrelazado a la historia de muchas más personas, por eso que cuidar lo que hablamos y hacemos es parte del crecimiento relacionado al carácter, aquel que nos da las herramientas para observar la vida y tomar buenas decisiones sin apurarnos ni dañar a otros.

También la capacidad de reinventarnos nos da la oportunidad de andar por muchos caminos durante nuestra historia y cada uno de ellos, si lo vemos con los ojos de la experiencia y el conocimiento, nos han dado muchas herramientas para hoy en día construir con base sólida lo que anhelamos para el futuro.

Después de toda esta metáfora romántica acerca de la mujer puedo contribuir con mi experiencia para expresarles un mensaje en este día de conmemoración de la mujer.

Si bien es cierto para mi la vida ha sido un viaje fascinante donde las alegrías y tristezas me han hecho crecer y convertirme en una Claudia valiente y con una constante visión sobre la importancia de cultivar el carácter, debo hacerme parte de aquel empuje que debe llevar a otras a cambiar su realidad y mejorar para su propio bien. Porque no se puede dar más de lo que poseemos y eso aplica para la amistad, la familia e incluso el amor de pareja.

Les contaré una historia, para que se den cuenta del valor nuestro y tiene que ver con la creación de la humanidad, pues dice la Biblia que Dios creo al hombre del polvo, pero luego vio que no era bueno que el estuviera solo, entonces hizo caer en un sueño profundo a Adán y desde una costilla de él creo a la mujer, pero lo que me llama la atención o en realidad lo que Dios me ha revelado en aquellas conversaciones intimas entre Padre e hija, es que somos tan especiales y misteriosas que nisiquiera en la Biblia aparece como Dios nos hizo. Por eso somos tan distintas en acciones, visiones, gustos, colores, pero con una base común que no cambia, pues somos la mayor y perfecta creación de un Padre amoroso.

¡Que rico es ser mujer!

Queridas todas, espero que mis palabras cargadas de amor hacia ustedes, puedan hoy motivarlas a que abran su corazón a una relación consigo mismas, donde puedan reconocer su valor y potencial, trabajando en ser mejores cada día; y aunque suene cliché esta frase es la verdad, pues todos los días debemos cultivar nuestro carácter porque tenemos mucho que aprender y también enseñar.

No se preocupen por los errores pues de ellos viene la enseñanza y debemos llorar para reconocer la alegría.

Que disfruten sintiéndose lo mejor de lo mejor, porque no es que yo se los recuerde, sino que diariamente cuando se observan en el espejo reconozcan el valor y calidad del hecho de ser féminas.

Y para terminar quiero hablarles a los hombres, porque ustedes son parte importante de los cambios que hoy estamos viviendo, pues por errores de cientos no meteremos en el mismo saco a millones de ustedes, que son nuestro complemento desde nuestros padres a nuestros esposos, hijos, amigos, etc. Todos ustedes tienen una responsabilidad con nuestro género y eso radica en el cuidarnos, respetarnos y entendernos porque si nos vamos a la base somos parte también de ustedes. Y no se dejen engañar por aquellos discursos aprendidos por años como: “a las mujeres no hay que entenderlas sino quererlas” frase que ha hecho que millones de nosotras no sean comprendidas por los hombres que las rodean y la comunicación se ha pasado por alto cuando es un pilar fundamental para que la sociedad y la vida misma funcione con claridad, amor y consciencia.

Vuelvo a mis hermosas y valientes mujeres para terminar este escrito con esta frase que les dejaré marcada con amor, feminidad, estilo y maquillaje, porque me encanta jugar con esas cosas: “Una mujer tiene la fuerza de mil búfalos para avanzar con valentía y la suavidad como un pétalo de una flor para calmar la tempestad del mundo”

Valentía cuando sea necesario y suavidad cuando nos toque calmar la tempestad.

Un abrazo de amor con cientos de flores y palabras lindas para ustedes.

Feliz 8M.

Claudia Zila

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