Los 5 pasos para controlar tus inventarios

Uno de los dolores de cabeza más frecuentes en las empresas son las diferencias de inventarios, no solo porque por no tener el proceso documental lógico con el físico en línea, sino que porque genera un montón de efectos negativos, que van desde la pérdida de capital de trabajo hasta el incumplimiento con los clientes, afectando la credibilidad de la organización y los niveles de servicio.

Dada esta importancia, en deLogística hemos compilado las diferentes gestiones (basadas en la Carta de Navegación Logística, definida por nosotros) que hemos realizado en distintas industrias optimizando inventarios y creando procedimientos de control proactivos, llegando a 5 pasos relevantes, concretos y rápidos, que nos permiten llegar a un resultado que por lo menos nos permita tener visibilidad para después tener trazabilidad, estos son:

  1. Preguntarse: Siempre hemos mencionado la importancia de hacerse las preguntas, es decir, enfocarse en lo que estamos revisando, que en este caso son los inventarios y pensar ¿tenemos el lógico con el físico en paralelo? ¿Sabemos las diferencias de inventarios, mermas y obsolescencia en la empresa? ¿Tomamos inventarios en forma periódica? ¿Controlamos la logística inversa o devoluciones? Las preguntas anteriores son las más importantes para empezar a trabajar.
  2. Revisar: Una vez identificadas las preguntas y contestadas, focalizamos nuestra revisión, por ejemplo; si no tenemos controlada la logística inversa, nuestros esfuerzos deben abocarse a revisar las opciones y buscar alternativas; o si –por ejemplo- no tenemos el proceso documental lógico con el físico en paralelo, el problema es de la cadena completa, aquí las medidas son urgentes, no importa el sistema lo que importa es que el físico esté en línea con el lógico, eso es vital.
  3. Actuar: Realizada la revisión y posterior diagnóstico de opciones, no nos queda más que aplicar en forma rápida y certera. Lamentablemente en cuanto más nos demoremos en concretar los cambios detectados anteriormente, más alta será la pérdida, ya que el flujo de inventarios es un proceso continuo que no para, es una “llave abierta” que fluye en forma constante.
  4. Medir: Actuamos y ya estamos controlando la fisura, ahora medimos y vemos, lo importante es que esta medición sea continua y correctiva, y nos daremos cuenta si las medidas surgieron efecto.
  5. Retroalimentar: Ya con los números y efectos de los controles, tenemos la retroalimentación necesaria para ir revisando en que parte de la cadena tenemos las mayores diferencias, mermas u obsolescencia, en esta retroalimentación sin duda siempre se debe considerar que los inventarios tienen que estar en sintonía tanto a nivel físico como lógico.

Los pasos anteriores buscan en cierta manera dar una estructura a uno de los controles más difíciles de la logística y a su vez más vitales, sin las existencias controladas la probabilidad de fracaso, disminución de utilidades, pérdida de clientes o cierre de una empresa son muy altos, por eso su nivel de importancia.

Moraleja: Partamos por contar los productos que recepcionamos y los productos que despachamos, ahí tenemos el 80% del problema solucionado, prueben y verán.

Rodrigo Rojas Toledo para www.delogistica.com

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